26 febrero, 2013

Toni Cantó y las denuncias falsas



Ricardo de Querol redactor-jefe de la sección de Sociedad de EL País escribe en el blog Mujeres del citado diario una entrada con el título de “Muy poco centrista lo tuyo, Toni” en la que quiere contestar las manifestaciones en twitter del diputado Toni Cantó  sobre la realidad de las denuncias falsas de maltrato en nuestro país, declaraciones en las que él mismo ha reconocido haber metido la pata


Y si sorprendente es el título, en el que el reproche “muy poco centrista” parece que tiene poco que ver con la verdad o falsedad de las citadas denuncias, sorprende más por el tuteo y la mención por el nombre de pila, máxime si tenemos en cuenta el blog desde el que se hacen y la posición en el periódico de quien las hace, o que a partir del título las acusaciones que vierte  van todas de machista para arriba. ¡Como para recordar la que se tiene armado desde esas mismas páginas cuando a una mujer se la denomina por el nombre de pila sin más!  Se imaginan un: Que mal lo tuyo, Lola o Elena o Soraya para referirse a las declaraciones de una diputada.


Todo lo que viene a continuación no desmerece en absoluto. Primero la equiparación de sus declaraciones con las de los senadores estadounidenses que justificaron la violación durante la reciente campaña electoral, o la petición de silencio “En un momento en que medio mundo está movilizándose contra la violencia contra la mujer, sea por el maltrato en pareja o por las agresiones sexuales, desde India hasta Londres, de México a El Cairo, UPyD se sitúa en el lado de los que quitan importancia al problema, los que creen que se exagera, que la mayoría de denuncias son falsas, que no mueren tantas mujeres como dicen los periódicos.”


Lo cierto es que nada parece responder  a lo que debiera ser el tema a tratar: la existencia o no de denuncias falsas y si la legislación de género en nuestro país se puede catalogar como igualitaria. Nada de eso se clarifica. En su lugar una sucesión de anatemas y avisos de peligro de descarrilamiento político para quien ose poner en cuestión lo que a este respecto se tiene legislado en nuestro país. O el asombro de que un periodista pretenda limitar el derecho de expresión sobre la existencia o no de denuncias falsas de maltrato con el pretexto de que existe una campaña mundial contra la violación.


Adolfo Tobeña en esta entrevista http://www.terceracultura.net/tc/?p=4442 se refiere a este asunto en los siguientes términos: “También es medible la violencia doméstica de algunos individuos. Hombres que maltratan y matan mujeres y mujeres que maltratan y matan hombres. Previamente a los asesinatos han pasado muchas cosas para que los hombres maten mujeres y a menudo acaben matándose ellos, porque la cadena a menudo tiene esta secuencia: el hombre mata la mujer y acaba matándose él. O mujeres que matan hombres, que en general no es por vía violenta, sino por envenenamiento o por delegación. En este asunto, hay que decir que, en contra de lo que se suele pensar, la proporción mujeres/hombres asesinados por confrontaciones familiares no es 999 a 1 o 99 a 1, sino 70 a 30, y esto en España y en casi todos los países. Detrás de estas muertes hay historias de relación y sentimentales complicadas y no únicamente brotes violentos intempestivos.” 


24 febrero, 2013

Los hombres y la conciencia de género



En más de una ocasión hemos planteado en esta bitácora la cuestión de la ausencia de conciencia de género de los varones.  Cuando a Elisabeth Badinter le preguntaron por qué los hombres, principales perjudicados por las políticas neofeministas, no reaccionaban ante las mismas ella respondió que porque no querían ser tachados de machistas. Ivon Dallaire escribió  que los hombres son el único grupo social contra el que se puede despotricar públicamente sin que nadie, ni ellos mismos, reaccionen. Ahora Enric Carbó en esta entrada dice que no le resulta gracioso que  esperemos a que sean otros quienes decidan lo que se haya de entender por hombre.


He de confesar que me he planteado esta cuestión montones de veces sin encontrar una respuesta que me satisficiera mínimamente. Sigo sin encontrarla, por eso en respuesta a la cuestión que plantea la entrada de Enric me gustaría decir que: a estas alturas tengo la sensación de que los hombres aguantarán cualquier cosa que se diga de ellos. Como si en su mente no hubiera tal cosa como “los hombres”. Como si se pudiesen pensar sin “género”. Y derivado de lo anterior formularía algunas preguntas que quizá no sean inútiles: ¿Pudiera ser que finalmente el genérico hombres entendido como humanidad nos hiciera perder la noción de hombres como conjunto de varones? De ser cierto, ¿siempre habrá sido así? 



06 febrero, 2013

Educación: Filosofía


He decidido colgar aquí lo que en principio era un comentario a esta entrada de pseudópodo en la que se nos pedía comentar nuestra experiencia como estudiantes de filosofía en el bachillerato y sugerencias para hacer en relación a la impartición de la misma. Pero dada su longitud y también a que se va un poco del terreno estricto de la pregunta me ha parecido que quizá tendría mejor acomodo como entrada en este lugar. También con la intención de suscitar y promover un debate sobre la educación que vaya más allá de los comentarios a PISA y lo que termine siendo  la reforma educativa.

Mi experiencia como estudiante de la Filosofía del bachillerato no debió ser muy estimulante y el recuerdo es sin matices. De ese modo para mí además de lo simpática que me resultaba la figura de Sócrates tratando de meter a la gente en apuros con preguntas (im)pertinentes, Platón y Aristóteles tenían el valor de un Euclides o un Tolomeo. Habían tenido un enorme mérito en su tiempo como fundadores de la Filosofía pero el suyo era un pensamiento obsoleto  que de ningún modo podría echar luz sobre los problemas de nuestro tiempo.

Pero hete aquí que, a cuenta de poner la bitácora en marcha y ponerme un poco más en serio con el tema de la educación, no hago más que tropezarme  con Aristóteles a quien  se menciona fundamentalmente  en el terreno de la ética, lo que me anima a leer  su Ética a Nicómaco, pero también algunas otras obras de Platón  y todo lo relacionado con la disputa entre sofistas, Sócrates y Platón, en la que muchos quieren ver un duelo no muy diferente al que se mantiene en la actualidad entre quienes están a favor y en contra del postmodernismo, el relativismo y el constructivismo. Por supuesto antes y después de ese momento he leído a otros autores más contemporáneos.

Lo cierto es que descubro que en el pensamiento filosófico no sucede lo que en el científico donde los avances van dejando  obsoletas algunas explicaciones, sino que, es perfectamente factible encontrar en los debates del presente mucho más que ecos de aquellos que tuvieron lugar en la Grecia clásica y no están tan lejos como podría pensarse en lo que atañe a lo que sea la realidad de las cosas, a los problemas relacionados con la ética o la política y tantas otras cuestiones que sería prolijo enumerar. Como no resulta difícil rastrear concepciones totalitarias de la ética y el Estado del momento presente en la obra de Platón.

Pero continúo con la figura de Aristóteles porque en uno de los últimos libros de J.A. Marina: La inteligencia ejecutiva, un concepto de inteligencia que va más allá de la cognitiva o la emocional,  de gran trascendencia en el campo educativo y que integraría las habilidades siguientes:
  • Inhibir la respuesta: no dejarse llevar por la impulsividad
  • Dirigir la atención: Poder concentrarse en una tarea, y saber evitar las distracciones.
  • Control emocional: La capacidad para resistir los movimientos emocionales que perturban la acción
  • Planificación y organización de metas.
  • Inicio y mantenimiento de la acción: Hay niños y adultos que son muy lentos en comenzar una tarea o incapaces de mantenerla.
  • Flexibilidad: La capacidad de cambiar de estrategia, de aprender cosas nuevas o de aprender de los errores.
  • Manejo de la memoria de trabajo: Capacidad para aprovechar los conocimientos que se tienen.
  • Manejo de la metacognición: Reflexionar sobre nuestro modo de pensar o de actuar, con el fin de mejorarlo.
Concepto que resume y recoge el pensamiento más actual de la neurociencia, la psicología y la pedagogía, lo encuentra sintetizado en el posicionamiento de Aristóteles en relación con la educación del carácter, “ethos” en griego.

Pero es que además en un libro que acabo de leer, y que aprovecho para recomendar a quienes como yo no sean más que aficionados a estos temas y quieran tener una visión panorámica de la historia de la filosofía a través de algo más de 40 autores,  cada vez que habla de él es para dedicarle un piropo mayor y si en las primeras páginas dice: “La brillantez de Aristóteles tuvo un desafortunado efecto secundario. Era tan inteligente y sus estudios tan concienzudos, que muchos de los que leyeron su obra pensaron que tenía razón en todo.” El propio Darwin quedó impresionado con sus estudios de biología.

Y  hacia el final del libro podemos leer: “Durante la mayor parte del siglo XX, los filósofos perdieron el contacto con los grandes pensadores del pasado. La Teoría de la Justicia de Rawls es una de las escasas obras de filosofía política escritas en el siglo pasado que merece la pena citar junto con las de Aristóteles, Hobbes, Locke, Rousseau, Hume y Kant.  (El libro es de Nigel Warburton y el título: Una pequeña historia de la filosofía.)

Lo cierto es que a mí el pensamiento filosófico me parece fascinante e imprescindible para moverse en el tiempo  que vivimos, mucho más necesario por la cantidad de capas con que se nos presenta este mundo de apariencias y en el que siempre hay que profundizar si se quiere conocer  aquello sobre lo que se asienta.  Procuraría por ello que los alumnos vieran lo que de actualidad hay en cada autor y en cómo la posición filosófica que subyace en cada uno de ellos, también cada  momento histórico, acaban configurando visiones del mundo y de la sociedad muy diferentes. Desde luego los animaría a posicionarse ante las grandes cuestiones y los graves problemas del momento presente y a procurar hacerlo con rigor y método.

Para lo relacionado con filosofía y ciencia, me parece muy interesante la obra de Mario Bunge. 

La lista de las habilidades ejecutivas la he tomado de la obra de J. A. Marina: La inteligencia ejecutiva. 


01 febrero, 2013

Dicen que el suicidio ha dejado de ser tabú.


En esta bitácora hemos hablado de suicidio, hemos criticado el silencio oficial sobre el tema, hemos criticado que siguiera siendo un tabú cuando la Sociedad española de psiquiatría pedía otra actitud. Ahora hemos de celebrar que por fin el Congreso se decida a romper el silencio sobre este asunto,


pero al tiempo lamentar el tratamiento se le está dando sobre todo en cuanto a las causas que intervienen en tan terrible decisión. Como podemos leer en la noticia :

¿Qué se puede hacer? Los portavoces parlamentarios se responden al unísono: prevenir. El lugar deben ser los colegios, las instituciones penitenciarias y las residencias geriátricas y sobre la base de que la mayoría de los suicidios, en torno al 90%, tienen como base trastornos mentales tales como la depresión, la esquizofrenia y el alcoholismo. En la proposición no de ley se pide al Gobierno que aborde “de forma multidisciplinar el suicidio, incluyendo la acción de Educación, Sanidad y Políticas Sociales, para estudiar factores de riesgo que pueden desencadenar procesos suicidas”.

Nada de lo que aquí hemos comentado en relación a los procesos de separación y ruptura del matrimonio, como tampoco ninguna referencia a la incidencia por sexo. Pero para que se observe el “despiste” que sobre éste y otros muchos temas de gran relevancia social, existe en nuestra sociedad, léase en este otro enlace a qué causa atribuye Simón Dolan un porcentaje también del 90%