28 enero, 2010

Pacto educativo



Algunas veces sucede que lo más difícil de ver lo tenemos al lado, y en los temas de género sucede esto con bastante frecuencia. El ministro de educación presentó ayer un documento con 100 medidas para un pacto educativo, en el que a pesar de su elevado número nada se dice de la brecha de género en la educación, como tampoco se hace referencia a  la perspectiva de unos claustros más equilibrados en su composición por sexos, particularmente en la educación primaria.

Pretender otros detalles como el cambio de “filosofía” en la educación o la modificación de los currículos aligerándolos de materias para darles un mayor peso específico a las instrumentales de tal modo que se incida sobre los problemas más graves de nuestro sistema, entre ellos el fracaso y abandono escolar, dificultades en lectura comprensiva y matemáticas o ausencia de excelencia, aún cuando son citados, no parece que puedan ser abordados con una reforma cuya medida estrella será que cuarto de la ESO pasará a tener dos perfiles, uno para los alumnos que vayan a hacer la FP y otro para los de Bachillerato.

El corsé a la educación en nuestro país se le pone cuando se pretende contentar a todos: sindicatos, asociaciones de padres de alumnos, comunidades autónomas y partidos políticos y todo ello dentro de la general aquiescencia con los postulados del feminismo institucional. En esas condiciones promover un cambio es poco menos que imposible y finalmente termina sucediendo lo que con esta reforma, que se hace al margen de quienes fundamentalmente la tienen que protagonizar: el profesorado -y éste a tenor de lo leído en los comentarios a la noticia no parecen entusiasmados con lo que se les está proponiendo-, y termina quedándose en algo mini  por muy macro que sea el documento en que quede recogida.

Pero para que  se vea la fragilidad en que nos movemos y hasta qué punto la educación es vicaria de luchas ideológicas que poco tienen que ver con todo lo que hablamos más arriba baste decir que ayer mismo la revista Magisnet recogía esta información sin que a estas alturas tenga muy claro cómo es posible que por una lado el ministro se reúna con los consejeros de las comunidades para analizar un texto con 100 medidas y por otro lado otros estén decidiendo los contenidos y por quién ha de ser impartida la educación sexual a nuestros alumnos, sin que tampoco me sea dado decir si no se estará abriendo otro frente tipo educación para la ciudadanía, aunque lo sucedido recientemente en Extremadura con uno de esos cursos no invite justamente al optimismo. 

27 enero, 2010

Docencia sabia

Por continuar con los temas relacionados con la educación quiero traer a esta entrada una cita larga de Mario Bunge, conocido filósofo realista, contrario a las tesis constructivistas y relativista para quien:

“… el constructivismo pedagógico no sólo es falso. También es perjudicial a causa de que niega la verdad objetiva, elimina la crítica y el debate y hace prescindibles a los docentes.”

Pero que no tiene empacho un poco más adelante en expresar lo siguiente:

“Aún así, un autoproclamado constructivista, si es un docente sagaz puede tener más éxito que otro realista pero tedioso, que cree que hay que dar de comer en la boca a los estudiantes, en lugar de motivarlos a estudiar por sí mismos. Este será el caso si el docente constructivista alienta a los estudiantes a pensar por sí mismos, en tanto que su colega realista les exige un parloteo sin juicio. La razón de su éxito será que, como afirmaron hace mucho tiempo María Montessori y John Dewey, la exploración estimulada por la curiosidad es más interesante y, por ende, mucho más motivadora y grata que la repetición de fórmulas que se entienden a medias. Con todo, se espera que los instructores de ciencias ofrezcan alguna guía, aunque sólo fuera para evitar pérdidas de tiempo y el correspondiente desaliento que caracteriza  las empresas que consisten en el ciego ensayo y error. También se espera de los docentes que controlen si sus estudiantes dan las respuestas correctas y si estiman de manera apropiada el error de medición. O sea, el docente constructivista, si es mínimamente competente y responsable, tendrá que admitir que, después de todo, el error y por ende también la verdad importan.” (A la caza de la realidad, Mario Bunge)

25 enero, 2010

Educación líquida

Quizá algún día no ocurra, pero de momento debemos aceptar que con la misma facilidad que nos damos de bruces con la noticia de que la universidad de Sevilla ha creado una norma con el objeto de dar “garantías” al alumno copiador ante la posibilidad de una decisión “arbitraria” del profesor, en otro momento, nos podemos tropezar con que para otros la forma de atajar el problema de indisciplina en las aulas es considerar autoridad pública al profesor.


Pero en los tiempos de desconcierto que corren todo parece posible, tanto una norma que considera al profesor una especie de subalterno sin capacidad para expulsar a quien ha cogido copiando, como la de quienes consideran que la solución a los problemas educativos no está en la familia, la escuela y la sociedad -comenzando por la política-, y prefieren remitirlos a la justicia y los tribunales; y todo ello al tiempo que se lamenta la desaparición de la vieja figura del maestro y se dice que es necesario devolver autoridad y prestigio a la figura del profesor.

En un mundo líquido como el que vivimos lo normal es que los problemas sociales se diluyan con la misma facilidad con la que el agua se escurre entre los dedos, y todas las instancias, comenzando por el Gobierno y los sindicatos y continuando por todos los demás, han decidido: bien no reconocer el problema,  bien trasladar la responsabilidad de lo que ocurre a otros, con el resultado de que la enseñanza y la escuela cuando no son noticia por cosas como las anteriormente mencionadas, lo son por unos resultados que las sitúan a la cola de Europa.

22 enero, 2010

Fracaso escolar y brecha de género en Suecia

El número de Magisnet correspondiente a la actual semana viene a mí parecer con un contenido muy interesante y entre otras cosas trae las conclusiones que Inger Enkvist extrae de un estudio reciente sobre la educación en Suecia. http://www.magisnet.com/noticia/5588/INFORMACION/informe-desmonta-ocho-afirmaciones-com%C3%BAnmente-aceptadas-verdades.html
Sorprende que en dos sociedades tan diferentes por su historia y tantas otras cosas, en ambas corra paralelo un importantísimo deterioro de la calidad educativa acompañado de un incremento continuado de la brecha que separa los resultados de chicos y chicas. La información que aporta en esta entrevista, unido a la contenida  en este enlace http://www.iesgrancapitan.org/blog05/?p=456  creo que constituyen un material muy interesante para el análisis y la reflexión no ya sobre lo que pueda estar sucediendo en Suecia, sino sobre lo que ocurre en nuestro país al tiempo que abre el interrogante sobre qué factores pueden estar influyendo en que los resultados en una y otra sociedad caminen en paralelo.

18 enero, 2010

Constructivismo

En estos momentos, y en dos blogs diferentes que yo respeto mucho:


Se está produciendo un debate  alrededor del “constructivismo pedagógico”, que más tarde o más temprano habrá que extender al constructivismo social si de verdad queremos  afrontar una crítica a fondo del actual feminismo y su concepción del patriarcado como una construcción social, tanto como de los principios sobre los que se asienta nuestro modelo educativo que como todos sabéis nos coloca en los últimos puestos de la U.E. y al nivel de países de los llamados en vías de desarrollo.

Afirmaciones como la de Pierre Bordieu sobre que “las diferencias visibles en los órganos sexuales masculinos y femeninos son una construcción social” o que la ciencia, la objetividad y la verdad son sólo herramientas de dominación de los varones ( Mario Bunge, en A la caza de la realidad), tienen que ser vistas como lo que son: falacias sin pies ni cabeza,  no más acertadas que las de quienes consideran que nuestro sistema educativo, el 2º con mayor fracaso escolar de la U.E., es igualitario, o de quienes dicen de él que se trata del mejor de nuestra historia.   

Por mi parte ya os anuncio que mi participación en el debate sería al nivel de aficionado a estos temas y sin pretensión de que vaya más allá del intento de poner de manifiesto la verdadera naturaleza del feminismo que nos gobierna, o el deseo de apuntar algunas líneas de hacia dónde debería ir el sistema educativo para superar algunas de sus más graves deficiencias: fracaso y abandono escolar,  ausencia de excelencia y brecha de género.

P.D. 1 Existe entre nosotros una persona que se dedica a colgar en un foro de discusión algunas de las entradas de esta bitácora y  otras fuentes, sin mencionar a sus verdaderos autores. Por mi parte le pido que cese en tal práctica o que cuando menos tenga a bien citar la bitácora de donde procede la entrada.    

P.D. 2  Acabo de enterarme de esa noticia realmente revolucionaria, como gusta entender la revolución a algunos, de que la Universidad de Sevilla garantiza el derecho a no ser expulsado del examen al alumno que haya sido cogido copiando. No sé, me faltan palabras para decir cualquier cosa, sólo constatar hasta que punto la figura del profesor se desdibuja, y como la autonomía, casi habría que decir autodeterminación, del alumno se hace sagrada. A este paso terminaremos perdiendo hasta la capacidad de asombro...


06 enero, 2010

El eterno retorno

Parece que el razonamiento circular se ha impuesto y nada hemos avanzado desde que El País, hace un tiempo, publicó en portada aquel titular: las mujeres cobran un 40 % menos que los hombres. Ayer tocaba publicación de los datos del paro de diciembre y los acumulados del año 2009, cuyo resumen más o menos puede ser éste:  

Por sexos, entre los hombres el paro subió en diciembre en 72.135 personas (el 3,72%), hasta sumar 2.012.536 desempleados, en tanto que entre las mujeres bajó en 17.478 (el 0,91% menos) y situó el total de paradas en 1.911.067. En el año 2009, el paro masculino subió en 436.069 personas (el 27,66%) y el femenino aumentó en 358.571 (23,10%).

A lo que añado yo que esta crisis ha supuesto no sólo la inversión de las estadísticas de paro masculino y femenino. Mientras que al inicio de la misma el paro femenino superaba ampliamente al masculino, ahora el masculino es superior y la tendencia es a que esa brecha se abra en perjuicio de los hombres a pesar de su mayor disponibilidad para ocupar cualquier puesto de trabajo. Todo lo cual habla bien a las claras de que si alguna diferencia cualitativa cabría destacar sería la de de la mayor calidad y estabilidad del empleo femenino.  

Pues bien,  que esta crisis haya supuesto la destrucción de mucho más empleo masculino que femenino, no sólo no ha sido destacado ni por la prensa, ni los poderes públicos incluidos los sindicatos, sino que la legislación sigue manteniendo como prioritaria la promoción de la contratación femenina, por eso se entiende menos el cambio de criterio de todos para, en lugar de señalar lo que esta crisis está suponiendo para el colectivo masculino se siga insistiendo en la sempiterna discriminación femenina aunque para ello haya que echar mano de estadísticas trucadas.

En este contexto, lo que ayer destacaba el diario El País era la discriminación salarial femenina con este titular: Discriminada por mujer (y más aún) por madre, sin que nos sea dado conocer qué hizo que ahora la discriminación salarial ya no sea del 40% sino del 20%, tampoco en qué sectores, actividades, edades, etc. se produce, ni por qué no interviene la inspección de trabajo. Evidentemente, todas esas cosas no se señalan porque sencillamente no pueden señalarse ni para el 20 % que se dice ahora, ni para el 40% que se decía ayer. En la hemeroteca del propio diario están los declaraciones  del entonces ministro del ramo: señor Caldera, pera desmentir tal discriminación.

Nos encontramos ante uno más de esos agujeros negros del pensamiento feminista en los que se hace una afirmación sin que nos sea dado conocer sobre qué base se sostiene, excepto la de la  repetición machacona hasta convertirla en una mentira estadística socialmente asumida. Y ya son demasiados los agujeros negros y las mentiras estadísticas de este pensamiento, tantos que de seguir así aparecerá todo él como un gran agujero negro.

Por eso quiero concluir esta entrada haciendo un llamamiento a que cese tanta irracionalidad y tanta desigualdad y  cambio de criterio según se trate de analizar lo masculino o lo femenino; pero mucho me temo que mi éxito no será mayor que si pidiese que se tratase de igual manera la muerte en Madrid de ese hombre a manos de una mujer, que se trató la muerte en Andalucía de una mujer a manos de su marido. Claro está que de nuevo estaríamos entrando en un agujero negro está vez referido al poder y  las relaciones da pareja. 

04 enero, 2010

¿Neomachismo?

Las declaraciones de Francisco Serrano en torno a las consecuencias perversas de la LVG, han levantado un debate en torno a la misma que ahora el feminismo de género pretende parar en seco, olvidándose de esos 161.189 hombres que habiendo sido denunciados su causa resultó o bien sobreseída: 115.768 casos,  o bien con veredicto de absolución: 45.421 casos, lo que representa el 61 % de las denuncias presentadas: 256.473, en el período 2005-08. Como si estas cifras no correspondiesen a personas de carne hueso este feminismo pretende que quien haga mención a ellas o plantee la modificación de la ley es un maltratador o algo peor, en cualquier caso un neomachista.

Por ejemplo aquí pero también los comentarios 362, 403, 434, 462, etcétera  a este artículo

En cuanto a la colaboración  de Pilar López mi primera intención era colgar un comentario en la noticia pero luego me di cuenta que era muy largo y pensé que mejor una entrada aquí en el blog. Hasta donde llevaba escrito decía:

Aunque pretende situarse del lado de los débiles y desheredados habla usted desde una posición de poder. El periódico en el que está le ha brindado esa tribuna, como hacen tantos otros todos los días, para hablar del tema de la violencia o de cualquier otro. Habla usted con el respaldo de todos los poderes: político, mediático, jurídico… Considerar que su lucha a lo que se asemeja es a la mantenida contra el colonialismo creo que resulta como mínimo una gran exageración. En lo relativo a esos 2.000.000 de maltratadores que cita sin desvelar su origen, muestra bien a las claras su escaso respeto por el rigor y la verdad en un asunto en el que todos estamos llamados a ser prudentes y donde nadie puede considerarse con ninguna patente de corso, aunque cada día más a que desde posiciones como la suya se nos brinden cifras fantásticas, sin ninguna relación con la realidad.

 Si su artículo pretendiera algún tipo de intercambio de opiniones me gustaría preguntarle si considera maltratadores a quienes están en desacuerdo con esta ley porque consagra una inasumible diferencia de trato judicial, y a todos los efectos, entre hombres y mujeres, y porque se ha demostrado que su uso ofrece amplio campo a la arbitrariedad y las denuncias falsas, o, si lo prefiere a esa situación en la que a alguien se le acusa de algo por lo que lo detienen, lo meten en un calabozo y después de celebrado el juicio sale absuelto. No puedo olvidar que el padre de Alba estaba en un calabozo de la Guardia Civil, acusado por su esposa de malos tratos hacia su hija, cuando se le comunicó  que la niña había sido víctima de una brutal paliza, por la que fueron condenados su ex esposa y su compañero.

No me extenderé en las condiciones de presión en que se mueve quién debe emitir sentencia y en como, de hacer caso a algunos miembros de la carrera judicial, en los supuestos de duda el veredicto siempre es en perjuicio del acusado. Tampoco sobre la inversión de la carga de la prueba y la ruptura de presunción de inocencia del acusado y a favor de una presunción de credibilidad de la mujer que  acusa. Estamos aquí ante derechos que forman parte del cogollo de lo que se considera un Estado democrático de derecho y de conquistas históricas de la humanidad -y digo humanidad: no hombres o mujeres- absolutamente irrenunciables. Considerar que quien las defiende y se pone de su lado es un maltratador a quien califica es a quien así opina.

En lo que respecta al autor de los comentarios al artículo de El País, tengo la impresión de que su lectura, al menos del primero de ellos,  se hace necesaria para saber qué piensa quien se considera un profeminista no machista, valedor de las mujeres y por tanto de la ley a la que sólo cambiaría para enducererla más, y cuál es su opinión sobre las reglas de juego, la discrepancia y la libertad de expresión en una sociedad democrática.

A los dos: que utilizan la estrategia del miedo, que pretenden reducir todo lo relativo a los sexos a un debate sobre la violencia, olvidando la institucional que también lo es, pero que a pesar de su posición de dominio en lo político y  jurídico va a ser muy  difícil seguir pretendiendo, que un Estado de derecho, que quiere presumir de tal, pueda mantener por mucho tiempo una ley que genera mes a mes centenares de damnificados. Por lo demás demasiadas veces en la historia hemos visto quien ayer discriminado, hoy discrimina, quien ayer perseguido, hoy persigue, quien pronto olvida  lo que ayer decía. 

03 enero, 2010

Para empezar el año


Como me lo he pasado muy bien leyendo el artículo de Juan J. Moralejo en La Voz de Galicia sobre el nuevo palabro: monomarental, lo cuelgo aquí en el deseo de que lo disfrutéis tanto como yo.  En cuanto a la viñeta de Erlich creo que sobran las palabras.