No hace mucho tiempo leí una preciosa novela: Entre cielo y tierra,
del escritor islandés Jón Kalman Stefánsson. Como recoge la contraportada: “Los
personajes de la novela se sitúan hace poco más de un siglo, en un poblado de
pescadores de los fiordos occidentales, entre montañas escarpadas y un mar
capaz tanto de dar alimento como de arrebatar vidas. Siguiendo una tradición
centenaria, salen a pescar desde muy jóvenes en escuetos botes de seis remos en
los que, a menudo, para alcanzar los bancos de bacalao, reman durante horas
entre el oscuro oleaje. No saben nadar….
Ahora leo un
reportaje en le Monde en el que se habla de cómo se forjó la solidaridad femenina
entre las islandesas, como consecuencia del “abandono” a que las sometían sus
maridos pescadores, y del que extraigo el párrafo de más abajo.
Car dans cette
île isolée soumise à de rudes conditions climatiques, où les femmes ont
longtemps été abandonnées par leurs pêcheurs de maris, "une solidarité unique s'est
développée par-delà les oppositions politiques ou idéologiques. L'idée
générale, c'est : nous sommes des femmes, donc nous sommes ensemble", explique Halldóra Traustadóttir. Ce
féminisme "à l'islandaise" est une école à part entière.
Es que los hombres, ya se sabe, son unos egoístas terribles: se meten en cascarones de madera para írselo a pasar bomba en la mar salada, mientras las mujeres, pobrecitas, se quedan aburridas en casa.
ResponderEliminarAthini
Y son mineros por amor a la silicosis (¿si las minas fueran cosas de mineras, no se reclamaría su cierre y una reconversión inmediata de las zonas mineras a otro tipo de desarrollo economico, basado en el sector servicios?)... y poceros por amor a las ratas...y matarifes porque es muy agradable el olor a sangre de ganado...
EliminarPor curiosidad, he buscado listas sobre los trabajos más peligrosos. La pesca esta siempre la primerita. He aquí una de las listas:
http://www.careerbuilder.com/Article/CB-800-En-Espanol-Los-trabajos-m%C3%A1s-peligrosos-del-mundo/
Mi impresión Athini es que si hay una palabra desafortunada para describir la situación esa es la de abandono. Si los hombres están en el mar es porque no abandonan, porque asumen un rol durísimo que fácilmente los puede llevar a la muerte. Si en algún caso se podría hablar de abandono sería aplicado a ellos mismos, abandonados a la suerte que les quiera deparar el mar para conseguir el sustento propio y de los suyos. Y abandonados ahora a la más completa de las ingratitudes.
ResponderEliminarHay un ejemplo mucho más radical, del que muy a menudo se quejan las feministas que dice así:
ResponderEliminar"En las guerras, las que más sufren son las mujeres, porque matan a sus maridos, a sus hijos, a sus hermanos y a sus amigos".
Suan
Y si no los matan pero los dejan inválidos para toda la vida, ellas vuelven a ser las que más sufren porque tienen que cuidarlos.
EliminarJeipi