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23 abril, 2011

Ciudadanía y genero

He vuelto a leer este artículo de Daniel Innerarity para comprobar que la perplejidad que me produjo la primera lectura no era cosa mía que veía extraños  donde no los había. Y aunque sigo igual de perplejo, porque el mercado al margen de que no es un invento de nadie si por alguien ha sido maltratado es justamente por la izquierda que cuando no sabe a quién culpar de sus errores inmediatamente recurre a los mercados, quiero dar la bienvenida a esa propuesta si eso puede llegar a significar que se va a acabar con el descontrol de la tarifa eléctrica, o de los precios de la gasolina, de la telefonía o de la conexión a internet que como un misterio jamás aclarado  siempre ha sido más cara y de peor calidad que en el resto de Europa.

Y dentro de la perplejidad no se acaba ahí mi apoyo a sus propuestas, particularmente a la expresada así “… que tenga el valor de aumentar las oportunidades para todos y contribuir a un sistema fundado sobre una verdadera meritocracia…” o también cuando habla de “… un sector público que no beneficia a los más pobres, sino a los mejor situados…”. Es decir, coincido plenamente en cuanto a lo que se debe hacer, lo que ya me resulta más difícil digerir es que esto pueda ser llevado a cabo por quienes hasta el presente se han encargado de tirar por tierra todos esos principios vanagloriándose de hacer  todo lo contrario. Es como pretender que los mejores defensores de la laicidad puedan ser quienes han garantizado la financiación pública de la Iglesia a perpetuidad, aunque luego les guste provocar tormentas con los crucifijos en la escuela y cosas así.

Lo dicho, apoyo  las propuestas  de Innerarity referidas al mercado, la meritocracia y la dimensión del sector público, lo que me cuesta creer es que este programa lo puedan llevar adelante quienes propugnan tanto en la escuela como en general a nivel social todo lo opuesto y quienes tienen en su seno a los y las principales promotores de que las cosas no hayan sido así hasta el presente, particularmente todo lo referido a la filosofía logse y las políticas feministas contrarias a cualquier iniciativa en la dirección de premiar el mérito y la capacidad y, sin embargo dispuestas a confundir, en la educación, igualdad con homogeneidad y, en lo social, no discriminación por razón de sexo con identidad de los géneros. Y más allá de estas cosas  anteponer los géneros a las personas, y arruinar la idea de ciudadanía como igualdad radical de todos los ciudadanos sin distinción de sexo, raza o religión. 

19 comentarios:

  1. El artículo suena a aquel famoso "bajar de impuestos es de izquierdas". Es decir, es de izquierdas todo aquello que los pensadores de izquierdas decidan, hasta las políticas neoliberales que aplica ZP. En España sólo habrá revueltas callejeras cuando gobierne el PP (si llega a hacerlo) y por temas que serán nimios en comparación con las políticas actuales. Pero el Sistema habrá conseguido desfogar a las masas para que todo siga igual, hasta el siguiente ciclo "socialdemócrata, rojo y feminista" (ya sabemos que la ideología de género sobrevivirá gobierne quién gobierne).

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  2. Para reírse, para indignarse, o para analizarlo fríamente. Especialmente vomitivo su desprecio hacia los hombres maltratados, demagógico su alegato contra la custodia compartida:

    http://www.youtube.com/watch?v=_sPYp8NRE2wnte

    Seguramente, la reciente sentencia del Supremo sobre hipotecas y divorcio le parece "machista".

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  3. Se nota que habla de memoria, que hubieran sido los que hubieran sido los datos de la realidad, datos que por supuesto no se ha tomado la molestia de estudiar y que por tanto desconoce, su discurso no variaría ni un ápice. He dejado de visualizar cuando hablaba de ese informe sobre el sexismo en la escuela de hace 20 años...

    La virtud de Lidia Falcón, sin embargo, es que muestra al feminismo en vivo y en directo. Ojalá todas fuesen tan trasparentes.

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  4. Cuanto más salga en La Noria, mejor.

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  5. Este comentario de Iñaki Gabilondo
    http://blogs.elpais.com/la-voz-de-inaki/2011/04/el-unico-motor-de-la-politica-son-los-antagonismos-.html

    expresa bastante bien algo que muchos venimos observando desde hace mucho tiempo y que el enuncia como exacerbar los antagonismos.

    Los dos grandes partidos cada día que pasa son más iguales pero como hay que pelear las elecciones no se habla de proyectos o de ideas, sencillamente se exacerban antagonismos en cuestiones que la mayor parte de la veces nada tienen que ver con políticas reales.

    Lo más grave de todo esto, y eso no lo dice Iñaki lo digo yo, es que en lo que si mantienen un completo y blindado acuerdo es en liquidar con todas las fuerzas a cualquiera que pretenda asomar la cabeza en este régimen que se quiere bipartidista.
    Y claramente este país necesita salir de esta encerrona en la que sólo puede elegir entre lo malo y lo peor.

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  6. Desde que ocupa un papel más secundario, Gabilondo comienza a decir cosas sensatas. También recuerdo haberle oído decir sobre ZP que es un político que ha minimizado la verdadera dimensión de los problemas y exagerado su capacidad para resolverlos. Aún así, todos recordamos alguna homilía suya exacerbando ánimos, incluso con la complicidad de algún político. Sobre la creciente emocionalidad de las campañas electorales se ha escrito mucho. El hecho de que más de la mitad del electorado en los países occidentales sea femenino no ha sido ajeno a este fenómeno (en este blog he puesto un enlace a un documental de la BBC que describe este proceso). En las elecciones españolas al final se vota para que no gane el contrario, como expresión de esos dos minutos de odio del orwelliano que tanto cohesionan las sociedades totalitarias o azuzan el voto del rencor en las democracias.

    Sobre el tema de la exacerbación parece que empieza a haber un consenso entre opinadores de distinto signo ideológico:
    http://www.abc.es/20110426/opinion-colaboraciones/abcp-tiempo-berrea-20110426.html

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  7. Iñaki, desde hace mucho tiempo, las cosas que dice de Zapatero son todo menos bonitas. Pero al margen de eso, en mi opinión se trata de un gran profesional, con el que, a veces, coincido y, a veces, discrepo.

    Por ejemplo, en el tema del feminismo, que sin que tenga muy claras sus posiciones últimas me parece que va más bien en la línea de ese consenso generalizado de que se trata de lo que ahora toca.

    Aunque le he visto tener que explicarle con cierto apuro a una periodista de la Sexta, que le había preguntado si hacía algo en casa, que al igual que su mujer, él tampoco hacía nada.

    Creo que nunca he ocultado que vengo de la izquierda y que mis preferencias en algunas cosas siguen más en esa línea que en cualquier otra. Ahora bien, para mí hace mucho tiempo que el PSOE ha dejado de representar cualquier idea de izquierda y más bien pienso que pretende vender como izquierda una política de derechas.

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  8. Con Gabilondo me pasa lo mismo que a ti, aunque hace años coincidía más con él que ahora. Debe ser consecuencia de mi evolución hacia posiciones más liberales que las suyas. Liberales en el sentido de liberalismo ilustrado del que Javier Marías hacía un excelente resumen en su artículo del pasado domingo: http://www.elpais.com/articulo/portada/Inmovilizados/pavor/elpepusoceps/20110424elpepspor_20/Tes

    Es curiosa esa pregunta que se hace ahora a los hombres públicos para ver su grado de "feminismo": "¿Ayuda en la tareas del hogar?". Recuerdo haber escuchado una azorada respuesta de Rajoy a esa pregunta. Sin embargo, a Cospedal, Aguirre, Pajín o Chacón nadie les pregunta sobre las tareas domésticas y su grado de implicación, a pesar que incluso pueda llegar a ser menor que las de cualquier hombre de la calle. Normalmente la implicación en la tareas domésticas de las mujeres políticas no se cuestiona. Se da por hecha, a pesar de que a sus hijos les críen lo que ahora se llaman cuidadoras. Quizás habría que preguntarlas si cuando se estropea un enchufe en su casa lo cambian ellas. Porque esa es otra, habría que redefinir lo que se entienden por tareas domésticas, ahora que todo es "micro ondable" y el peso de esas tareas domésticas, sobre todo en lo que concierne a las mujeres profesionales y políticas de postin, descansa sobre otras mujeres que a veces no son justamente tratadas por sus empleadoras.

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  9. En relación con lo de liberal no sé si recuerdas este artículo http://www.almendron.com/tribuna/3080/ser-liberal/ de Francisco L. Laporta que colgué en la bitácora hace ya mucho tiempo titulado Ser liberal y que si en algún sentido me influyó ha sido justamente por el lado de que si hay algo que no se puede obviar es a las personas, que incluso la idea de igualdad no puede confundirse nunca con la uniformidad o la de homogeneización, que ha de construirse siempre desde la más alta consideración de la personas, de todas y cada una de ellas.
    Lo que, por ejemplo, significa que a nivel educativo haya que prestar atención no sólo a los que se quedan atrás, también a los que son capaces de más, y que eso debe ser compatible con buscar la igualdad de oportunidades a todos los niveles y con una política que haga mínimas las diferencias de renta y riqueza, pero sin desincentivar el esfuerzo y la dedicación, al modo de lo que sucede en algunos países nórdicos, de los que al parecer sólo habría que copiar sus políticas feministas, pero no sus niveles de éxito académico, o sus mercados de trabajo con unos índices de paro bajísimos, o su fiscalidad, o su atención a la salud de hombres y de mujeres, o tantas otras cosas.
    Lo que clama al cielo del PSOE es que siga hablando de izquierda con una sociedad en la que las diferencias, también las de renta y riqueza no paran de crecer, con unos índices de paro absolutamente enloquecidos, ya comienza a hablarse de 5.000.000 de parados, con un engaño permanente en lo relativo a la laicidad, con un fraude fiscal del que nunca se aclara el por qué no se aborda teniendo en cuenta que alcanza la increíble cifra de 70.000 millones de euros y tantas otras cosas que sería larguísimo enumerar.

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  10. Comparto tu concepción liberal. Por cierto, la presidenta de mi comunidad se expreso en términos parecidos a los tuyos con relación a la educación y fue tildada por la izquierda de elitista, neoliberal y no se cuantas lindezas más. Los países nórdicos fueron la fuente de inspiración de la socialdemocracia liberal que Felipe González quiso traernos (Olof Palme era su guía), pero tuvo que congelar ese ambicioso proyecto dadas nuestras peculiaridades culturales (básicamente aquellos países funcionan porque apenas tienen corrupción). Con relación al PSOE, mi memoria histórica me dice que ha sido el partido que el Sistema utiliza para las reconversiones salvajes, el mantenimiento de los privilegios de las élites económicas que nos gobiernan desde el franquismo, la degradación de los sistemas educativos (via LOGSE) para potenciar la concertación (ellos fueron los creadores) y el desarrollo de procesos de ingeniería social que favorecen la fragmentación social, el famoso divide y vencerás de toda la vida.

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  11. Personas, no género, Emilio. Lo has planteado bien desde el principio :)

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  12. Leído en un periódico a una candidata:

    "Tras hacer un balance de su gobierno, la presidenta madrileña ha recordado que es firme defensora de la austeridad en las cuentas. "Y las mujeres somos más austeras que los hombres", ha bromeado. "Si las mujeres mandásemos...".

    ¿Realmente la austeridad es patrimonio femenino?.

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  13. Anónimo10:37 p. m.

    Puede que la austeridad sea patrimonio femenino. Siempre y cuando consideremos como austeridad el gusto por las joyas, peletería ,las marcas (caras...), el cambio constante de prendas, abalorios, mobiliario, etc. en función de las modas, y no por su utilidad. Nótese que joyas, pieles etc. deben ser auténticas, osea caras: el oro es bonito por ser oro, no por parecer oro. La piel de conejo puede ser tan suave, colorido y abrigosa como cualquier otra, pero quien se la pondría. En fin, ya sabemos quien gasta el 80% de la riqueza generada, quien tiene más responsabilidad en los excesos del consumismo y sus fatales consecuencias medioambientales..y no quiero seguir por esta vía porque voy a acabar poniéndome misógino y no se trata de eso. No estamos contra las mujeres, estamos contra el sexismo, que en este momento se llama, sobre todo, feminismo. Aunque ellas nieguen que el feminismo es sexismo, lo es por su definición y por su práctica habitual.
    Arturo

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  14. Anónimo11:04 p. m.

    Acabo de leer el artículo de Laporta y me parece fenomenal. Justo cuando empezaba a pensar: "si claro todo eso es la definición del liberalismo clásico pero ahora el término ha evolucionado..." va Laporta y me desarma escribiendo "donde la confusión se ha impuesto con cinismo y facilidad ha sido en materia económica.[...] Se llaman desde entonces liberales (o neoliberales) a quienes son únicamente partidarios del libre mercado, tomando irresponsablemente la parte por el todo.[...], no son liberales, sino libre-mercadistas."
    Arturo

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  15. Como sabéis, para mí el tema de la educación es prioritario, y no solo desde el punto de vista del género que también, dada la brecha abierta entre niños y niñas y que a mi entender responde a eso, cuestiones de género, que el poder instituido pretende ignorar y que las ignoremos ocultando el dato y renunciando a explicarlo.
    Habitualmente participo en Deseducativos y más esporádicamente en otros foros por ejemplo aquí: http://www.terceracultura.net/tc/?p=3047#comments.

    Pues bien, ayer al enterarme de que en Hora 25 se iba a hablar de excelencia en la educación decidí escuchar el programa. Todo bien, es decir las personas invitadas una pedagoga y una profesora de un centro de Madrid en el que se imparte el bachillerato internacional, les parecía bien la idea que entendían dentro del campo de la igualdad de oportunidades, de ofrecer a los alumnos más aventajados la posibilidad de seguir progresando, hasta que dos personas una que se presentó como profesora con 28 años de servicio y otra persona que hablaba desde Andalucía pretendían rebatir la idea porque eso no era escuela inclusiva, además de cantar no sé que logros gigantescos de nuestro sistema.

    Es decir, pura ideología, sin ningún soporte en datos de la realidad, sólo ideología basada además en mentiras como hablar de logros de un sistema educativo como el andaluz en el que se produce un fracaso escolar del 40 %. Que frente a un dato tan rotundo alguien pretenda que estamos en algún tipo de sistema inclusivo o algún éxito de nuestro sistema educativo sólo se puede calificar de desvergüenza.

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  16. Arturo, Adam Smith desde luego no abogaba por el "dejar hacer" salvaje que propugna los "emiliobotines" que han apoyado durante estos años a Zapatero. Y en su libro "Teoría de los sentimientos morales" señala que bajo las leyes del mercado, o por encima de ellas, está el comportamiento ético que debe regularlas.
    Las socialdemócracias del norte de Europa mantienen bajos impuestos de sociedades, tienen una flexibilidad laboral mayor que la española (recodemos la flexiseguridad danesa que se mencionó de pasada en la últimas generales) y mantienen su estado de bienestar con el IVA, mucho más elevado que el nuestro, sobre todo en los artículos de lujo. Además, el comportamiento ético de sus políticos, con las ovejas negras que puedan tener, es, en general, superior al de los nuestros.

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  18. Las pedagogas políticamente correctas y feministas, como parece ser que eran las intervinientes andaluzas de Hora 25, no tienen reparos en condenar la educación patriarcal y sexista que años se practicaba en los colegios de curas y monjas. Sin embargo, nuestro sistema educativo se apartó hacer años de aquellos esquemas. Ahora predomina el profesorado femenino, pedagogías que se llaman “comprensivas” y se han incorporado las nuevas tecnologías.

    El fracaso escolar, a pesar de estos nuevos modelos de enseñanza, sigue siendo de los más elevados de nuestro entrono, la brecha de género, a favor de las chicas, no deja de ensancharse. Pero la ideología sigue en su bunker. Como ese estudio al que aludía Lidia Falcón sobre el sexismo de la enseñanza de hace 20 años y que para ella sigue siendo dogma de fé. No hace falta aumentar el número de docentes masculinos. La educación diferenciada es una propuesta reaccionaria. Los entornos que favorecen la verdadera igualdad de oportunidades, fomentando el esfuerzo y la excelencia corresponden al paradigma elitista de la “derecha extrema”. ¿Hubo alguna intervención de algún oyente en Hora 25?. Me imagino que dado el target, las opiniones estarían más cercanas a la pedagogía andaluza.

    Por cierto que no abogo un retorno a los coles de curas y monjas, pero que se siga utilizando aquello como justificación y defensa del desastre actual resulta bastante cínico. Tan cansino como el famoso “que viene la ultraderecha” que braman algunos partidos cuando ya no tienen nada decente que proponer.

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  19. Más sobre el liberalismo, en este artículo se hacen algunas matizaciones que también me resultan interesantes al artículo de Javier Marías que ya mencioné en una entrada anterior:

    http://www.abc.es/20110428/opinion-colaboraciones/abcp-liberalismo-economico-20110428.html

    "...sin pedagogía social, sin compromisos claros, no habrá autoridad moral para imponer sacrificios, para racionalizar el Estado de Bienestar, esa bella construcción humana que requiere de mucha productividad, mucha competitividad y mucho liberalismo económico para ser sostenible. Pero me temo que es más que eso, me temo que ya no quedan liberales en Europa." Esto dice el último párrafo.

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