Siguiendo el drama de los mineros chilenos atrapados a 700 metros de profundidad, quizá no sería ocioso plantearse algunos interrogantes en relación con la igualdad y la ideología de género, por ejemplo qué valor cabe dar al hecho de que todos sean varones… quizá algún tipo de discriminación de la mujer en lo laboral - conviene recordar que cuando en algunos países se dictaron leyes que prohibían el trabajo de las mujeres en la minas, las feministas del momento las contestaron -, también preguntarse por el significado de conceptos como paridad, incluso qué queda de ese varón presentado como clase dominante opresora y explotadora de las mujeres. Aunque quizá estas preguntas jamás vayan a ser contestadas por quienes desde lo oficial hablan un día sí y otro también de la terrible opresión de las mujeres.
Eso mismo pensé yo. Joder, el 97% de las muertes laborales en España son de hombres, ahí hay una clara discriminación y las femilistas no dicen nada. Ellas sólo quieren los trabajos cómodos, de rascarse la barriga. Nos ha jodido, esa igualdad sólo para lo bueno también la quiero yo.
ResponderEliminarMenuda cara le echan.
"Es mejor ser hombre que mujer, porque hasta el hombre más miserable tiene una mujer a la cual mandar". (Isabel Allende, novelista chilena).
ResponderEliminarAl margen del sarcasmo que provocaría cotejar el texto anterior con la posición social y económica de Isabel Allende frente a la de sus paisanos mineros, me gustaría aprovechar la ocasión para preguntarle a las mujeres que navegan por este blog lo siguiente: ¿si pudieras volver a nacer, qué elegirías, ser hombre o mujer? Porque se supone que toda persona "discriminada" envidiará la suerte del no discriminado, ¿o no?
José Perera
Hoy que me conecto pensaba poner una entrada en mi blog sobre esto de Chile. Te adelantaste, compañero.
ResponderEliminarSospecho que tu, como yo, te ganas el pan no sudando en la mina, sino con el culo confortablemente sentado en una silla toda la jornada laboral. ¿Te imaginas que ese drama de los chilenos lo reivindicaras como una deuda hacia tu condición masculina para medrar laboralmente?
Misma idea. Mi último post está en la misma línea.
ResponderEliminarhttp://jugodeladrillo.blogspot.com/2010/08/los-mineros-chilenos-y-la-ubicua.html
Salute.
Celebro la coincidencia y volver a tener noticias tuyas.
ResponderEliminarEl feminismo, ya se sabe, ha decidido que, por lo que a ellas atañe, con una pequeña parte del mundo les es suficiente, en eso no son avariciosas, claro está que esa pequeña parte es la que se refiere a la mitad de los cargos políticos no de la militancia política, la mitad de los consejos de administración no la mitad de los empleos, de algunos ni tan siquiera uno, la mitad…
¿¡Qué digo mitad?! la totalidad de las presentadoras de la televisión, la totalidad de los organismos de “igualdad”… y así podríamos continuar con la enumeración, pero con esos pocos ejemplos es fácil ver que se trata de una mitad compleja, no simple, una igualdad no simétrica, sino interesada, una equidad como la del que parte y reparte…
En fin, en relación con el sexismo del lenguaje sucede otro tanto de lo mismo hay que denunciar el sexismo cundo lo que se reclama es el uso de jueza, edila, y algunos más, sin que eso lleve a pensar que por la misma se deba incorporar al diccionario criminala, verduga, minera (no sólo referido a la cuenca)…